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20 de marzo de 2015

#historiasdeunmomento


chefchaouen - marruecos

a las 13.30h en punto coge el abrigo que se apoya en el respaldo de su silla, agarra la bolsa de tela que cuelga del perchero con su comida y sale camino del ascensor casi corriendo. espera en el rellano mientras mira cómo los números se van iluminando conforme el ascensor va subiendo y ella, impaciente, presiona varias veces el botón como si con eso hiciera que fuera a llegar antes. por fin se abren las puertas y pulsa con prisa el 0. cruza las puertas del edificio abrochándose el abrigo y una bocanada de aire fresco seguida de un suspiro la relajan de golpe. necesitaba salir de ahí un rato, las paredes grises e insulsas de la oficina se le venían encima y el fondo de pantalla con el recuerdo de sus últimas vacaciones en Cerdeña lo tiene tan visto que ya no sirve para evadirla. apunta en su cabeza "cambiar foto fondo pantalla".

cruza la calle que la separa del parque mientras el solecito que anuncia que la primavera está al caer la va devolviendo a la vida. se adentra un poco en él; no es suficientemente grande como para hacerle perder de vista los edificios altos que lo rodean pero se dirige a un banco desde donde, por lo menos, ya no se oye el zumbido de los coches.

se sienta con el sol dándole en la cara y abre el tupper con el couscous de verduras que preparó la noche anterior. no tiene nada que ver con un couscous marroquí de los de verdad pero le sale bastante rico.

cierra los ojos para poder tomar mejor el sol mientras da el primer bocado. inmediatamente este la traslada a su primera vez en Marrakech, en 2005, en ese fin de año en que sus tíos les dijeron que, esta vez sí, había un bebé en camino. recuerda estar tomando un té moruno en lo alto de una terraza en la plaza jemaa el fna cuando llegó la noticia que le produjo una grandísima alegría; quién hubiera dicho en ese momento que eran dos las que venían! el segundo bocado la lleva a una de esas callejuelas laberínticas del zoco donde unos niños jugaban a pelota en la calle. recuerda cómo chillaban todos alborotados en medio de grandes risas y, aunque no logra acordarse de cómo fue, tiene una foto con todos ellos sonriendo a la cámara. Marruecos en ese primer viaje ya la cautivó: su paleta de colores tierra, la sonrisa de la gente, el sabor de la pastela… su segunda vez fue, sin duda, la más emotiva: llegó a Chefchaouen, el pueblecito que había acogido a su abuela, recién cumplido un año, y a sus 6 hermanos. recuerda haber quedado totalmente fascinada por esas callejuelas azules y blancas, como si las hubieran sacado de un cuento; dormir en el parador que regentaba su bisuabuela; las impresionantes vistas al Atlas desde la ventana de su modesta y colorida habitación; y visitar la pensión: la pensión donde su abuela vivía con sus hermanos y su madre, acogiendo a cualquier persona que no pudiera permitirse otros precios. recuerda subir las escaleras de la bonita, pequeña y acogedora pensión para llegar hasta la azotea y disfrutar de las vistas de la ciudad entera: unas vistas como sacadas del cuento de Aladín, que tanta paz le transmitieron. la guinda a ese viaje fue cuando, 2 días más tarde, en Tetuán, pudo ver y visitar la casa donde su madre había vivido junto con sus padres, primos y tíos; el hospital donde nació, el edificio donde trabajaba su abuelo… todo aquello era también su historia, formaba parte de sus raíces, y poder verlo y tocarlo era una sensación abrumadora y a la vez tranquilizante, algo que la conectaba con una parte muy profunda de ella misma.


chefchaouen - marruecos

chefchaouen - marruecos
chefchaouen - marruecos

y, finalmente, su tercer viaje, esta vez al desierto, en un humilde albergue en Ait Ben Haddou que rebosaba cariño y amor, regentado por dos hermanos y sus dos esposas. en grupo, una experiencia distinta, pero igual de mágica. ahí pudo correr por el desierto, ver el amanecer más bonito que había visto nunca y uno de los cielos más estrellados. recordó cómo se despedía de Marruecos, de nuevo en Marrakech, de noche, mientras contemplaba el trajín y el encanto que envolvía la plaza jemaa el fna, mirándola y sintiéndose en casa, con una sensación de calma difícil de justificar, sobre todo teniendo en cuenta el movimiento y ruido que había a su alrededor, y recordó cómo se despedía del país sabiendo que esa no sería, ni mucho menos, la última vez.

el último bocado de couscous la devuelve a la realidad. solo han pasado 35 minutos pero aquella sensación de asfixia y agobio quedan ya muy lejos. empieza a comerse la manzana mientras mira a su alrededor; está claro que la gente ansía la llegada de la primavera porque parece que todo el mundo se ha lanzado a la calle al primer atisbo de sol: personas solas leyendo en un banco, hombres y mujeres trajeados que, como ella, han convertido el parque en su particular comedor, personas mayores que pasean o charlan junto a sus cuidadoras, algún joven echando la siestecita tumbado en el césped…

apura los últimos minutos antes de levantarse y dirigirse nuevamente a la oficina, cerrando los ojos y recreando las buenas sensaciones que le transmiten sus viajes, ahora totalmente renovada y serena. quién dijo que viajar fuera caro?

chefchaouen - marruecos

tetuán - marruecos

tetuán - marruecos

este post pertenece a la serie que he empezado recientemente titulado #historiasdeunmomento; pequeñas incursiones a cualquier momento del día donde se pueda encontrar un instante de bienestar. si te apetece, puedes leer ese momento de calma en el desayuno o las historias que pasan en un viaje en metro.

feliz fin de semana!! :)


pd. muy probablemente el martes no habrá post porque estaré recién llegada de Pádova, donde nos vamos esta tarde a pasar un fin de semana largo con unos amigos, así que nos vemos de nuevo el viernes que viene!

pd2. Marruecos tiene magia y un viaje a mis orígenes


17 de marzo de 2015

de sabiduría popular

jarrón-con-flores-de-sabiduría-popular

hay una cosa que me gusta mucho: los truquillos y consejos de sabiduría popular. esos que se pasan de generación en generación, que aprendes de las abuelas y las madres, de profesores, amigas, compañeras de trabajo…; esos que son muy simples y se te quedan grabados sin esfuerzo; esos que te facilitan la vida. cuando aprendo uno nuevo, me emociono, como si acabara de descubrir una gran verdad.

hace unos cuantos meses, Bri, del blog designlovefest, publicó un listado de remedios y consejos caseros de este estilo y me encantó, y he pensado en empezar yo un recopilatorio con algunos de los que conozco pero que podamos ampliar entre todos si tú también sabes alguno y lo dejas en los comentarios. te animas?

ahí van los míos!  


1. si tienes tos por la noche, corta una cebolla por la mitad y déjala al lado de la cama o debajo de ella, verás como la tos para automáticamente. eso sí, al día siguiente encárgate de ventilar bien la habitación porque el olor va a ser potente!

2. si te quemas, para evitar que se te hagan ampollas y facilitar que se te regenere la piel cuanto antes, pon la parte quemada en una clara de huevo, es miraculoso

3. tira el poso del café en el fregadero y no en la basura, ayuda a desatascar las tuberías

4. echa una aspirina en el agua de un jarrón con flores y las flores te durarán más

5. cuando estés a punto de salir de la ducha, cambia el agua caliente por la fría y pásatela por todo el cuerpo, ayuda a mejorar la circulación sanguínea

6. enjuaga tu cabello en agua fría antes de terminar la ducha para evitar que se te seque

7. antes de tirar un limón recién exprimido, pásatelo por las uñas, ayuda a fortalecerlas y les da brillo

8. si haces croquetas y quieres congelarlas, congélalas un ratito primero poniéndolas una al lado de otra en una bandeja o en la tapa de un tupper; a las 2h/3h, que estarán congeladas, ya las puedes meter en una bolsa todas juntas y volverlas a guardar; de este modo, como ya están congeladas, no hay riesgo de que se peguen entre ellas

9. comprar billetes de avión en martes es más barato (alguien que, de hecho, pueda corroborar o desmentir esto? lo he leído y oído varias veces e intento comprarlos en martes por si acaso pero reconozco que me siento un poco tonta haciéndolo!)

10. cuando te sientas confundido, perdido, indeciso... no tomes ninguna decisión y date un tiempo para ver las cosas un poco más claras; es como si fueras andando por un bosque y de repente te sorprende una niebla muy densa, qué haces? no moverte, sentarte y esperar a que se disipe porque, si continúas andando sin ver por dónde vas, lo más probable es que acabes perdido (esta a mí me ayuda mucho)

11. fíate de tu instinto. hay personas muy indecisas (creo que yo encabezo la lista) que pueden estar dudando eternamente sobre cualquier cosa pero siempre hay una de las opciones que, por lo que sea, resuena más contigo, aunque no siempre sea la más sensata o lógica. guíate por esta sensación en el estómago y no le pongas tanta cabeza (desde que me la aplico, la toma de decisiones es mucho más rápida; después sigo dudando sobre si habré decidido lo adecuado, o no, pero entiendo que esto forma parte de cómo soy y de mis inseguridades, pero por lo menos ya no alargo indefinidamente el tomar una decisión)

café-y-desayuno-de-sabiduría-popular
te animas a seguir aumentando la lista?

feliz martes! :)


pd. si te gustan las curiosidades, dale un vistazo a estas 14 curiosidades acerca de Estocolmo  

{imágenes vía 1 - 2}

13 de marzo de 2015

la felicidad es...


chica-leyendo-balcón

abalanzarte sobre alguien que hace tiempo que no ves; despertarte y tomarte una taza de té caliente acurrucada en el sofá; sentarte delante del calor de una chimenea; el olor a pan recién hecho; que tu hermano se presente por sorpresa en Barcelona; vencer las inseguridades y apuntarte, por fin, a clases de yoga; ver una película entre semana; darte el gustazo y comprarte un bocadillo de frankfurt para cenar un martes por la noche; ir a recogerlo a la salida del trabajo; plantar una planta y ver cómo va creciendo; una ducha, después de un día duro, con la luz de las velas; escuchar a alguien reírse a carcajadas y acabar riendo tú también; ver cómo va saliendo el sol por detrás de los edificios; quedarte dormida en el sofá 15minutos después de comer, sin darte cuenta; cruzar la puerta de casa y descalzarte; sentirte orgullosa de ti misma; escuchar el piar de los pájaros por la mañana; salir a la calle y darte cuenta de que los árboles han empezado a florecer; el olor a bebé; salir al balcón y dejar que el sol de invierno te acaricie mientras lees; preparar chocolate al baño maría y rebañar los restos del cazo con los dedos; regalarte algo porque síque estés andando por la calle y, de repente, te llegue su olor; verlo darle su primera papilla con ternura y cierta inseguridad y darte cuenta de que nos vamos haciendo mayores; que empiece a sonar esa canción que hace mucho que no escuchabas y que tanto te recuerda a él; un paseo por la playa una mañana soleada de inviernotenerla en tus brazos y que, cuando se despierte, lo primero que haga sea regalarte una sonrisa; las sombras que se proyectan en las paredes debido a los rayos de sol que entran por la ventana; programar la siguiente escapada; reencontrarte con amigas que hace mucho que no ves y sentirte tan a gusto como cuando las veías a diario; poner la música bien alta mientras cocinas y utilizar la cuchara de madera como micrófono…

como siempre, no se trata de hacer o tener grandes cosas, simplemente de abrir bien los ojos y el corazón y dejar que la vida te sorprenda.

feliz fin de semana :)


pd. este post pertenece a la serie la felicidad es… que publico de forma mensual. como siempre, estoy más que encantada de leer qué es la felicidad para ti en los comentarios!

pd1. la felicidad también es unas vacaciones de verano y otros detalles sin importancia  


{imagen vía we heart it}


10 de marzo de 2015

por una comunicación más consciente


pareja hablando - por una comunicación más consciente

hace tiempo que doy vueltas a un tema que me inquieta y, a veces, incluso me desborda. hoy me ha apetecido poner mis pensamientos en orden en lo que a esto respecta y compartirlo aquí. el tema en cuestión es la comunicación o, mejor dicho, la comunicación que se deriva del exceso de información.

no es ninguna novedad que con los smartphones y los avances tecnológicos tenemos acceso desde hace un tiempo ya a toda la información que queramos en cualquier momento del día: información inmediata. además de los canales ordinarios de hace unos años como el teléfono, la televisión, la prensa, el e-mail... hemos añadido facebooks, twitters, instagrams, whatsapps, pinterests, tumblrs... todo! y miedo me da porque parece que esto es solo el principio... 

la verdad es que me parece súper bien; el acceso a la información es básico. lo que a mí me preocupa es la gestión personal que hago de toda esta información que llega non-stop y que muchas veces percibo como invasiva, y de qué manera acabo comunicándome yo con el resto de personas.

hacía tiempo que sentía que fracasaba en ese intento permanente de dar una respuesta correcta y rápida a todos los inputs que recibo durante el día, a mis ganas de estar en todo y, lo que es peor, con la sensación cada vez más fuerte de que la comunicación del cara a cara que es para mí la más importante, salía gravemente perjudicada en pos de la comunicación digital.

y justo hace 2 semanas Jessica Comingore publicó un post al respecto que parecía resumir a la perfección lo que yo pensaba, e incluso proponía algunos consejos para una comunicación un poco más mindful o consciente. el post me gustó muchísimo y me di cuenta de que ya estaba poniendo en práctica algunas de sus ideas. su escrito me motivó a seguir reflexionando sobre el tema y a acabar haciendo el mío propio, con algunas propuestas más para una comunicación más presente y consciente:

chica trabajando ordenador - por una comunicación más consciente

- cuando estés con alguien, no compruebes el móvil, contestes whatsapp...; de hecho, si puedes dejar el móvil en el bolso, mucho mejor

- mientras estés trabajando, no mires el móvil: desconéctalo, ponlo en silencio, tenlo en otra habitación... cuando quieras hacer un descanso, aprovecha y míralo entonces. a mí me cunde mucho más el tiempo y estoy más concentrada que si me interrumpo cada vez que oigo una notificación y, cuando después contesto mensajes, estoy por la conversación, no estoy intentando contestar lo más rápido posible para poder seguir trabajando

- no mandes e-mails relacionados con el trabajo antes de las 08h, a partir de las 20h o en fines de semana (ni los contestes); creo que ayuda a establecer unos límites y muestra también que eres respetuoso con el tiempo del otro

- que lo primero que hagas al despertarte o lo último antes de acostarte no sea comprobar el teléfono. a mí me gusta salir de la cama, ir a la cocina y tomarme un vaso de agua con zumo de limón y desperezarme antes de encender el teléfono y, cuando voy a la cama, apago el móvil y leo 15minutos o charlo con Rícard antes de apagar la luz. lo que me gustaría, de hecho, es ser capaz de apagar el móvil 2h antes de acostarme pero siempre me da apuro y lo mantengo encendido "por si acaso"

- cuando sea el cumpleaños de alguien, no le mandes un whatsapp, llámalo/a

- manda una felicitación de cumpleaños, una postal mientras estés de viaje, una carta… utilizando el correo convencional, de vez en cuando; sabes la ilusión que hace abrir el buzón y encontrar algo que no sea la factura del gas o un recibo del banco?

por una comunicación más consciente

- sé sincero/a y, si no te apetece hacer algo, dilo; una relación que te importe mínimamente debería poder ser honesta

- en la misma línea que la anterior, si alguien ha dicho o hecho algo que te ha molestado o dolido, dilo también. reconozco que a mí tanto esta como la anterior me cuestan mucho más de lo que sería deseable porque no me gusta nada el conflicto e intento evitarlo a toda costa pero es mucho mejor decirlo (bien, asertivamente) y poder continuar con una relación sincera y transparente, que ir acumulando esa sensación de malestar por no haber expresado lo que deberías en su momento

- en una conversación, aprende a hablar desde el YO y no desde el TÚ: (A MÍ) me ha dolido esto que has hecho, no (TÚ) me has hecho daño

- aprende a escuchar en silencio, a dejar hablar al otro. muchísimas veces es más importante solamente escuchar bien que decir algo apropiado

- encuentra espacios para verte con la gente que te importa; aunque sean espacios cortos, aunque no puedan ser muy a menudo... pero encuéntralos

- encuentra espacios de desconexión total, on y off line, donde puedas estar solo tú, con tus silencios y tus pensamientos

- y acepta que no podemos estar en todo; prioriza e intenta que, cuando hagas algo, ya sea leer un blog, escribir un e-mail, llevar una reunión o tomar café con una amiga, estés presente

amigas charlando - por una comunicación más consciente

cómo lo ves? tiene algún sentido para ti esto que digo? qué haces tú para tener una comunicación más presente o consciente?


feliz semana! :)


{imágenes: 1 - 2 - 3 - 4 - 5}

6 de marzo de 2015

inspiration {playlist}


bailar - inspiration playlist

música para preparar la comida, para conducir, para ducharse, música para hacer la cama, para estudiar o cenar con los amigos, música para trabajar, para correr, para relajarse, música para desahogarse y para ir por la calle, música para decorar el árbol de Navidad, música para cantar a pleno pulmón... cada momento tiene su propia banda sonora. 

aunque soy de las que disfruta con el silencio, hay ocasiones en que la música es el complemento perfecto. en casa utilizo mucho 8tracks que, tras escribir 3 adjetivos que describen la música que te apetece escuchar, te ofrece infinitas listas con ese tono; pero, desde que preparamos una playlist para allegorein dinner barcelona, empecé a aficionarme a crear mis propias listas. con las de Silvia sintonizo mucho así que me ha parecido una buena idea, siguiendo su ejemplo, compartir aquí una mía; es la que últimamente me acompaña por las mañanas, mientras desayuno y trabajo en el ordenador:


1. Hero - Family of the Year
2. You Got Me Singing - Leonard Cohen
3. XO - John Mayer
4. Creep - Radiohead
5. Comptine d'un autre été, l'après-midi - Yann Tiersen
6. Breathe - RHODES
7. You and Me - You + Me
8. Always Gold - Radical Face
9. Mango Tree - Angus & Julia Stone
10. Lost Stars - Keira Knightley
11. Modern Times - Army Of Me
12. World Spins Madly On - The Weepies
13. Magic - Coldplay
14. I won't give up - Jason Mraz
15. The Fault in Our Stars - Troye Sivan
16. Hand on Heart - Olly Murs
17. Pride - Syntax
18. Belated Promise Ring - Iron & Wine
19. Take Me To Church - Hozier
20. Everything's Okay - Lenka
21. Dead Hearts - Stars
22. Honey And The Moon - Joseph Arthur
23. Hide And Seek - Imogen Heap

puedes escucharla aquí. espero que la disfrutes :) feliz fin de semana! ***


{imagen vía Sonambulistas}

3 de marzo de 2015

un domingo cualquiera

barcelona - un domingo cualquiera

un domingo cualquiera nos despertaríamos a las 9h pero no saldríamos de la cama hasta las 9.45h; tú te vendrías a mi lado o yo al tuyo y nos acurrucaríamos alargando esos minutos antes de levantarnos con la luz del día entrando ya por la puerta y la ventana de la habitación.

de la cama pasarías al sofá, a mirar en el ipad el resumen de los partidos de la NBA mientras yo pondría el agua a hervir para preparar un té. desayunaríamos en la mesa del sofá hablando de lo que podríamos hacer ese día; yo mis tostadas, kiwi y alguna galleta, y tú, tu bocadillo y tus galletas mojadas en la leche. yo entonces me levantaría para hacer la cama mientras tú recoges y pones la lavadora.

nos vestiríamos y cogeríamos el coche. yo iría distraída mirando por la ventana, con mi verborrea habitual, soltando ideas inconexas y pensamientos mientras tú intentarías seguir mi conversación, principalmente en silencio, pero diciendo algo aquí y allá.


cielo - un domingo cualquiera

al salir del coche te atarías los botines, te pondrías los cascos y me besarías antes de empezar a correr. yo te vería desaparecer a lo lejos mientras empiezo a caminar, subiendo la cremallera de tu sudadera porque hace más frío del que pensaba. pasearía por ese camino de tierra admirando esta fantástica ciudad, mientras a mi paso se irían cruzando ciclistas, corredores y otros paseadores que, como yo, en familia o en solitario, habrían decidido subir hasta allí para disfrutar del sol y de las vistas. a medida que avanzase mis pensamientos se irían liberando, desapareciendo aquellas preocupaciones absurdas que solemos crearnos para dejar paso a una mente más clara, a una sensación de bienestar y serenidad interna.


un domingo cualquiera

al volver me sentaría en una de las mesas metálicas de la terraza del único bar y esperaría a que regresaras leyendo mi última adquisición mientras el sol tenue de invierno acariciase mi cara. llegarías agotado por el esfuerzo pero con la cara resplandeciente de satisfacción por la hazaña lograda y volveríamos a casa, esta vez conduciendo yo, compartiendo las sensaciones del recorrido.

de vuelta a casa nos ducharíamos y esperaríamos que la comida estuviera lista con unas patatas fritas bañadas en salsa espinaler y unos berberechos. después de comer caeríamos rendidos en una siesta divina de casi una hora en el sofá, con la tele de fondo hablando bajito. al despertarnos todavía haríamos el remolón un rato más y finalmente nos levantaríamos con la motivación de merendar algo con chocolate. luego nos sentaríamos a trabajar un ratito, tú con tu proyecto y yo con el mío, interrumpiéndonos de vez en cuando para consultarnos e intercambiar opiniones. a las 20.30h daríamos por finalizada la sesión y mientras uno doblase la ropa tendida, el otro pondría la pizza al horno porque ya se sabe que los domingos por la noche son duros y una pizza hace que pasen mejor. y con la pizza calentita y crujiente nos sentaríamos en el sofá para ver el último capítulo de Suits.


un domingo cualquiera

y cuando ya estuviéramos en la cama, tú con tu libro y yo con mis pensamientos, mirando al techo, sonreiría y pensaría cuánto me gustan estos domingos contigo y te quitaría la revista de las manos para que me hicieras un poco de caso y tú te quejarías medio riendo, sabiendo de antemano que es una batalla perdida.